Llegamos en Abangaritos (por Puntarenas) después de la noche ha caido. Tan pronto como llegamos, fuimos a la iglesia para participar en el oculto y compartir con la comunidad. Uno de los jovenes de Funda Vida, Gary, cantó unas canciones de Hip Hop, y luego dos compartieron sus testimonios. Después, hicieron un correografía. A pesar de ser una noche durante la semana, todavía hicieron oculto. Fue una noche buena para conocer la comunidad. Pero después tuvimos que armar las tiendas en el obscuro.
Durante los siguientes días, trabajamos muy duro y hicimos muchas actividades. Un grupo preparó musica y adoración para la noche. Unos practicaron coreografía, unos hicieron actividades y manualidades con los niños, y unos excavaron una zanja arrodonda de la iglesia para construir un muro.
Hablé con Edgar sobre esa iglesia y el pueblito de Abangaritos. En ese pueblo solo hay una soda y una pulpería que proveen la comida. Hay una cancha de fútbol y una escuela que ofrecen educación y actividades. Hay un bar que provee la cerbeza. Y la iglesia que provee esperanza y goza. La iglesia trae un poquito de rivalidad contra el bar. Cuando estabamos allá a veces la música, alabanzas, y bailes de la iglesia casi inunda el ruido del bar. De repente no quieren que la iglesia les quite la clientela.
La iglesia ha sido en proceso por 5 años. Ahora unos palos suportan un techo de lata adentro de una estructura de concreto. Durante esos cinco años, las paredes de la estructura fueron construidos bloque por bloque. Es decir, los miembros trajeron sus diezmos… unos bloques… cada semana por años hasta que se llegó soficientes bloques para construir las paredes. Ahora, esperan un techo, que va a ser construido en julio de este año. Me pareció tan interesante que cada persona ha traido un pedazo de esa iglesia hasta que se llegó en lo que tienen ahora.
Poco a poco la comunidad ha aceptado la iglesia en su pueblo. Edgar me explicó que la iglesia le ha apoyado a la gente del pueblo, y muchos recursos, actividades, y bendiciones ha ido a ese pueblo – todo a través de la iglesia para que la gente pueda saber que esa iglesia y él que la iglesia representa es una fuente de vida y esperanza.
Es un lugar con bastante necesidad. La gente de Abangaritos cosecha sandías para exportar. Pero esa fuente de trabajo solo sucede cuatro meses por año. El resto del año – ocho meses del año – no tienen un fuente de ingresos fijo. Y además, cada tres años el río sube y inunda la casa de la pastora y su familia. Tienen que quitar y poner todos sus posesiones encima del techo hasta baja el río.
Hablando de inundaciones, nuestra último día allá, tuvimos una experiencia que nos enseño un poquito de lo que sufre la gente cada año. El noche de sabado, a aproximadamente las 2 de la noche, sucedió un aguacero tan fuerte que algunas tiendas se inundaron. Unos quince jovenes tenían que buscar refugio debajo del techo de la cocina fuera de la casa. Afortunadamente, los mascotes les compartieron sus camas con los damnificados. Pero nadie se quejó, pero nos dimos cuenta que tuvimos una pequeña experiencía que esas personas sufren con frequencia.
Hicimos mucho más, llegando gastado en nuestras bolsas de sleeping cada noche. Hicimos trucos, clases de hip-hop, manualidades, una fogata, y dramas. Mostramos una pelicula familiar y gratis para toda la comunidad. Mucha gente vino pero no quiería entrar y sentarse. Pero algunas familias nuevas, que no eran miembros de la iglesia, vinieron y miraron la pelicula.